Arthur Rimbaud

Nació en Charleville, una pequeña y tranquila ciudad del norte de Francia, el 20 de octubre de 1854. Sus padres fueron el capitán Frederic Rimbaud y Vitalie Cuif, hija de una familia de pequeños terratenientes de la zona. Compartió su infancia y vida en el hogar con su hermano Frederic y sus dos hermanas, Vitalie e Isabelle. El padre abandonó la familia cuando Arthur tenía seis años, dejando a está con unos ingresos muy reducidos. La madre, que se hizo cargo de la administración de la casa y cuidado de los niños, tuvo una gran influencia en el desarrollo del primer carácter del joven Rimbaud. A los once años entró en el instituto de Charleville, destacando pronto como uno de sus más brillantes alumnos. Influyó mucho en su formación el profesor Izambaud, que tenía sólo veintiún años cuando llegó al instituto en 1870, convirtiéndose en un amigo y mentor del destacado alumno y fomentando el desarrollo excepcional y precoz de Rimbaud. Escapó por primera vez de su casa en el verano de 1870. Después de viajar sin billete en el tren de París y de pasar casi un semana en los calabozos de la policía, Izambaud lo devolvió junto a su madre en Charleville. Durante el tiempo que pasaba en su pueblo natal su forma de comportarse cambió radicalmente. El estudiante ejemplar se había convertido en un gamberro: se paseaba con el pelo largo, la ropa raída, fumando pipa y bebiendo por los bares de la zona. También fue una época de producción intelectual. El descubrimiento de la obra de Baudelaire y Verlaine, junto a su estudio en profundidad de los tratados ocultistas e iluministas influyeron en su poesía. Entre sus poemas de ese tiempo destaca "El Barco Ebrio", donde Rimbaud alcanzó una de las cumbres de su arte y produjó también una de las grandes obras maestras de la poesía francesa. Sólo contaba dieciséis años. Rimbaud envió sus poemas a Verlaine, que se sorprendió de la originalidad de los mismos y contestó con una invitación a viajar a París. No sólo le mandó dinero para el billete del tren, sino que le alojo con él y su esposa.

La familia de Verlaine culpó a Rimbaud de ser una mala influencia sobre él, pero lo cierto es que el primero ya tenía antecedentes de alcoholismo y comportamiento violento antes de la llegada de su joven amigo. Ambos poetas mantuvieron una relación complementaria e intensa durante los siguientes años.

Cuando su poesía y su persona fueron rechazados por los círculos de letras de París, Rimbaud no hizo nada para congraciarse, sino que ponía todo lo que estaba de su parte para hacerse desagradable. En septiembre de 1872 se traslada con Verlaine a Londres, en donde permanecen hasta abril de 1873, fecha en que Rimbaud retorna a la granja familiar en Roche, y en la que comienza a escribir "Una temporada en el Infierno", su más célebre libro de poemas -donde se encuentra La Virgen Loca entre sus capítulos.

Luego de varias peleas, en julio de 1873, Verlaine abandona a Rimbaud para volver a Bruselas.

Su libro "Una temporada en el infierno" fue mal acogido por los círculos literarios parisinos y Rimbaud regresó apesadumbrado a Charleville, donde arrojó al fuego todos sus papeles y manuscritos.

No se sabe con certeza si el último trabajo literario de Rimbaud fue "Una temporada en el Infierno" en 1873 o si algunos de los poemas de las "Iluminaciones" fueron escritos con posterioridad a esa fecha. Sin embargo, los biógrafos están de acuerdo en afirmar que Rimbaud abandonó definitivamente la literatura entre los años 1873 -1875, es decir, cuando solamente tenía veinte años de edad.

Rimbaud estuvo en Inglaterra en 1874 y después partió para emprender una vida de vagabundeo que durante los cinco años siguientes le llevaría a recorren toda Europa.

En 1880 trabajo al servicio de un comerciante de café de Adén, el cual lo envió como delegado comercial a Harar (en la actual Etiopía). Más adelante probó también fortuna como traficante de armas e incluso como tratante de esclavos, en distintas expediciones al interior de Africa. Cualquier rastro de su afán literario había desaparecido y su principal ambición era entonces el ahorrar tanto dinero como fuera posible, para poder vivir holgadamente tras su retorno a Francia. Durante este periodo de expatriación, Rimbaud empezó a ser reconocido en Francia como poeta.

Rimbaud tuvo que vender todas sus propiedades en Etiopía cuando, en febrero de 1891, enfermó de un tumor en la rodilla. Fue enviado a Francia donde poco después de su llegada a Marsella tuvieron que amputarle la pierna derecha. Falleció el 10 de noviembre de 1891.

Durante la última etapa de su vida Rimbaud gozó de cierta notoriedad entre los círculos literarios franceses. Esto se debió en parte a la aparición de una selección de sus poemas en el libro "Los Poetas Malditos" de Varlaine y a la publicación de las "Iluminaciones" en la revista La Vogue en 1886; y también en parte al aura de leyenda que comenzó a forjarse en torno a la figura del poeta.

Sobre Rimbaud han escrito Henry Miller, Yves Bonnefoy, Roland Barthes, Gilles Deleuze, J.P.Sartre y muchos más, siempre admirándolo y encontrando en el poeta un lugar exquisito para el pensamiento y la imaginación.

6 Espectáculos en los que participó