Tinta Negra

Reflexión sobre una aristocracia, que impide los cambios trascendentes y sociales dentro de una sociedad.

Rosalinda y Laura, dos amigas aristócratas de infancia se encuentran y reúnen guiadas por la envidia de los cambios sociales propiciados por Evita Perón, respecto al derecho al voto de las mujeres argentinas por primera vez en 1947. Al no ser ellas, las propiciadoras del cambio, planean una apuesta, el dibujar un grafitti frente a la casa de la heroína. Durante la noche salen Laura y su mayordomo Georgy y a escribir un mural macabro: "Qué viva el cáncer", y satisfacer así, sus frustraciones de artistas. Rosalinda espera ansiosa la llegada de Laura, a quién no le salen las manchas de pintura negra de las manos, eso provoca una serie de enredos, confusiones, confesiones amorosas, y hasta un fallido intento de asesinato, la pérdida de la memoria. El Detective Benítez Costa las encuentra culpables se deja seducir dejándolas libres y en impunidad frente a la graves afrentas.