Frente al simulacro de normalidad y certidumbre que el poder construye como estrategia de legitimación, los accidentes en la ficción evidencian el carácter no escencial,eventual,del orden que rige el mundo narrado, al mismo tiempo establecen un espacio de libertad imaginaria para las personas, es la posibilidad de formular un sentido distinto al establecido por la voz oficial que explica el mundo, más que una tragedia nos parece la reafirmación de las posibilidades vitales frente al orden inicial de la certeza
Es como si el teatro en este caso subrayara que no importa lo estable o solido que resulte la dominación del hombre por el hombre,el inevitable devenir de lo vivo no puede transcurrir en otra dirección que no sea la indeterminación..
En la incertidumbre que rodean las causas que originan la situación extraordinaria en la que se encuentran los personajes ,algo ocurre para que el grupo permanezca tanto tiempo detenido en el lugar, porque la visión que sigue al impacto del accidente activa la duda en la obra y surge el enigma ¿Quién conducía?, ¿Quién estaba? ,¿Quién miraba?.
Pero los habitantes de la comunidad y los personajes solo disponen de noticias probablemente falsas para dar sentido a la experiencia incomprensible en que se hallan; porque no existe el accidente original respecto del cual se pueda formular una esperanza de solución para restablecer la continuidad, solo hay acumulación incompleta de accidentes falaces revelando el carácter ficticio de las voces que narran la realidad social del grupo,no hay causa razonable que explique su estado,solo proliferación de ficciones.
Es una obra que mientras presenta al espectador el desarrollo de los eventos,es arrollada por otros acontecimientos,contiene accidentes y sufre accidentes,es a través de ellos que quedaran grabados en la piel a modo de recuerdo, las heridas de la unión entre hombre y máquina.
Clasificaciones: Teatro, Adultos
- SALA EL ÓPALO (2016)