Con esta fábula se pretendió crear un mundo imaginario llamado isla Gamarra. Este pueblo, habitado por personajes sin edad definida y que pertenecen a una misma familia, posibilita contar tres historias que se mezclan: una lucha fraticida por el poder político de la isla, una historia de amor y una confrontación entre dos vertientes espirituales opuestas, la cristiana y la de los nativos del pueblo. Todas las ideas desarrolladas en el texto provienen exclusivamente de la literatura, de la prensa, de la opinión pública y de la tradición oral paraguaya.
La puesta en escena está inspirada en una tradición popular de máscara ritual, el kamba Ra-anga.
La máscara es la quintaesencia del teatro, ella concretiza el elemento central de este arte: el personaje. Ella aleja a los actores de toda forma de interpretación realista y los lleva a desarrollar nuevos lenguajes artísticos, permiténdoles crear verdaderos mundos atemporales. Ella sirve, sobretodo, de puente entre el arte popular y el de vanguardia. El teatro de máscaras es el último refugio de las grandes tradiciones artesanales.
- Este espectáculo formó parte del evento: I Festival Internacional de Cultura Tres Fronteras