"Por su estupenda imaginación, por su planteo esencialmente lúdico, la obra de Paolantonio merece ser calificada como un hito. El baile no es ni salto desubicado ni acrobacia; el color no es desparramo ni empaste; el certero humor (especialmente centrado en la burla hacia las cosas reconocidas: instituciones, personas, lenguaje, etc.) no es manía; la profusa imaginación desplegada no se vuelve forzada necesidad de ser original; el fondo permanentemente reivindicativo de los menores no recae jamás en lo moralista: todos los personajes presentados, estructurados a partir de la realidad y de la actualidad (otra de las audacias, pero imprescindible en esta época) son humanos y si deformaciones que hagan dudar de su credibilidad. En lo artístico se destaca el completo trabajo de Graciela Martinelli, el parejo nivel alcanzado por los hombres del elenco y Bety Siskind, que protagoniza un momento de estupenda creatividad: aquel en que recita con tics de niña muy amanerada un verso sobre la lluvia. " Carlos Ulanovsky. La Opinión
- TEATRO SAN MARTIN (1972)