Se trata de dos piezas de las versiones I y II de este proyecto diseñado por Mariana Obersztern: Patchwork -de Matías Feldman- y Jaléi -de Diego Manso y dirigida por Luciano Suardi-. Los directores han trabajado en forma independiente sobre un dispositivo escénico creado por un artista plástico. En la primera edición este fue realizado por Miguel Mitlag y en la segunda, por Leandro Tartaglia.

El proceso de realización de una obra teatral suele iniciarse a través de un texto dramático, ó, eventualmente, a partir de una idea del director o actores. La escenografía o el material visual llegan luego, con el fin de mejorar o vestir al espectáculo, e incluso de allanarle problemas prácticos al director.

Extrapolando un término perteneciente al Código de procedimientos del Derecho procesal, el proyecto Inversión de la carga de la prueba propone la inversión de los habituales procedimientos. Aquí lo primero que existe es la escenografía ó dispositivo escénico. Es sobre este soporte sobre el cual el director y su equipo construyen el resto de la obra.
Mariana Obersztern.

Inversión de la Carga de la Prueba (I)
Patchwork
Dirección: Matías Feldman

Inversión de la Carga de la Prueba (II)
Jálei
Dirección: Luciano Suardi