No me dejes caer

No me dejes caer es una pieza que habla sobre volver a lo sensible, volver a escuchar los latidos del corazón, esa instancia donde el corazón nos confronta con la otredad, aquello que nunca vimos pero nunca deja de pulsar a distintas velocidades, con el misterio del ritmo, que es una afirmación a través de los latidos. La danza nace entre latido y latido.
La danza oscila entre latido y latido
La danza emana como ondas expansivas frecuencias sensibles. Por lo tanto, esto es una experiencia de danza, una danza de cuerpos que laten.