La casa de las pelucas Kosher

Mírele, la dueña de un negocio de pelucas Kosher, recibe en su casa a tres clientas de alta alcurnia, en un intento desesperado por vender sus productos. Lo que las visitas no saben es todo lo que la dueña de casa oculta: una vivienda maltrecha, una hija desconectada de la realidad y por sobre todo… un taller clandestino. Las talleristas cansadas del maltrato de Mírele intentaran encontrar una salida. En "La Casa de las Pelucas Kosher" se entrecruzan distintos mundos, que parecen contradictorios, pero que están entramados en la sensibilidad de sus vínculos.

DIJO LA PRENSA

“En ésta, su primera obra, Karina Hepner retrata con agudeza y humor un mundo tan reconocible como asfixiante. Nos hace ver cómo los mandatos familiares y sociales pueden cegarnos hasta hacernos hacer lo mismo que padecemos”.

PAULA MARULL

“Hepner muestra una buena y aguda mirada para contar, es audaz al sentar en el banquillo a la colectividad, los mandatos familiares, la religión, y la puerta de salida, pero aterra saber que la llave está del lado de adentro. (…) es muy audaz, es irreverente, cruelmente divertida, ácida hasta la burla, y dramáticamente intensa”.

MECHE MARTÍNEZ, Bitácora en actos.

“(…) deshilacha con humor y amargura el feroz matriarcado de una familia judía en decadencia. Una dramaturgia que apuesta con creatividad a un tiempo quebrado y a un grotesco con actrices notables”.

FRANCO VERDOIA

"Asumiendo con valentía las contradicciones que se presentan al interior de una comunidad confesiona (…) resulta en una crítica por mostración que provocará los juicios de valor explícitos interpelando a la conciencia y a los valores de les espectadores. (…) se atreve con el ejercicio del micropoder, la opresión materno filial, la explotación laboral extrema en situación de cautiverio y la doble moral que se escuda en lo sagrado para operar como siniestro, encarnados en este caso, en Mirele, una madre judía interpretada magistralmente por María Nydia Ursi Ducó. Un nutrido grupo de actrices que combinan diferentes registros de actuación, desde la afectación del grotesco hasta el crudo realismo, despliegan también, necesarios momentos de humor que intervienen el clima de tensión dramática.

Una obra ideal para el debate post función donde los temas se irán develando de a poco para finalmente apostar, con intención de esperanza, a la acción colectiva que pueda revertir ese y este estado de cosas. Yo que vos…"

JORGE NICOSIA