Esnatu

"Más y más mi propia lengua-se me aparece como un velo -que debe ser rasgado -para llegar a las cosas (o a la Nada) -detrás de él.", dijo Samuel Beckett en su carta alemana de 1937.
Tantas palabras, máscaras y hábitos se anteponen a nuestra verdadera entidad como personas. Parece que durante años y años, en algunos casos la vida entera, habláramos un lenguaje de pantomimas, de artilugios e ilusionismos; un lenguaje hecho de destellos superficiales y cargado de la angustia de intuir que somos otra cosa, algo más, o al menos disitinto, a lo que sin saber por qué ni cómo, construimos cada día como nuestra
identidad, sin ser más que una mueca frente al espejo o frente a los otros.
¿Cómo llevar una vida verdadera a la luz del día? ¿Cómo sobreponerse al miedo de haber errado el camino?
¿Qué signo, qué presencia, qué recuerdo podría ayudarnos a despertar?