El juicio de "El mercader de Venecia" de W. Shakespeare adaptado a nuestra Argentina. Un juicio donde se le exige al acusado, a cambio del dinero que debe, que se corte una libra de su propia carne en favor del acreedor.
Dos hombres comunes enfrentados: un comerciante contra un tenedor de libros.
Un absurdo juicio por jurado que nos lleva a reflexionar sobre el valor que le damos a nuestras acciones y a las de los demás. Con qué medimos lo que juzgamos y cuánto nos podemos alejar de quién en realidad somos.
Esta puesta y adaptación de "una libra de carne" resalta la crueldad con la que Cuzzani escribe a sus personajes. Pone en primer plano la soledad en la que se encuentra inmerso cada hombre intentando sobrevivir en un mundo donde la vida humana y la compasión están devaluadas.